8 sept 2011

Desenmascarado

La máscara acabó en la basura. La capa fue reciclada para trapos. El dracmovil terminó en un desguace.

El superhéroe de cómic que se había creado para sí mismo se rompió en mil pedazos, dejando a la vista al insignificante hombrecillo que era su personalidad secreta.

(Lo único que queda de él es la extraña habilidad para meterse en problemas).