Autómata

El piloto automático de su cabeza funciona perfectamente. Ofrece todas las funciones, y las hace todas a la perfección. Es casi imposible distinguir cuándo es él el que dirige y cuando no.

(Casi; alguien que sepa lo que está buscando, alguien a quien de verdad le importe, notará que falta ese brillo en los ojos, ese temblor apasionado en la voz, ese calor en el abrazo).

Pero se ha dado cuenta de que, de un tiempo a esta parte, al piloto automático le cuesta ceder el control. El botón de apagar no le funciona muy bien.

Se pregunta si, cuando se averíe del todo, alguien se dará cuenta.

Magia

Le preguntaron si creía en la Magia.

-¿Creer? No necesito creer. Yo sé que existe.

(Y era verdad).

¿Y tú? ¿Crees en la Magia?

Nada me gusta más

La Nada no tiene muy buena fama, acostumbrados como estamos a quererlo Todo.

Pero a mí me gusta la Nada. Está llena de posibilidades, abierta a cualquier cosa. Es amplia y espaciosa.

(Nada por aquí, Nada por allá... Y surge la Magia).

Enlazando palabras

Enlazadas, anudadas, inundadas, desnudas.
Descaradas, desarmadas, dadas y desesperadas.
Esperando, esperanzadas, especiales y especiadas.
Nada sosas, sinvergüenzas, saboreando sobradas.

Escuchando

Subido en una montaña rusa de emociones.
Cuando las palabras fallan...
La música habla.

(Dime: ¿Qué suena hoy en tu cabeza?).

Ilusa

A mi mente racional le gusta pensar que es ella la que manda, que tiene el control.

Pero tú te has asomado conmigo al borde del precipicio. A ti no puede engañarte. Tú sabes la verdad.

Ese control es sólo una (débil) ilusión.

Vida de cuento

Todo en su vida era luz, risas y alegría.
(Pero todo era un cuento).
No había Magia, ni Fuego, ni Tormentas.
Ni ninguna de las cosas que de verdad cuentan.

En su jaula de cristal

Se pregunta si podría romperla y escapar.

No parece tan sólida, pero las apariencias engañan...

(Mentira: sabe que podría romperla si quisiera; lo que de verdad se pregunta es si sería capaz de vivir ahí afuera).

(Todos parecen muy alegres y contentos, pero las apariencias engañan...).

No. No me olvido.

(Ni tampoco esa promesa: vivir intensamente cada momento).

¡Va por vosotros!

Inestable equilibrio

Aullando a la Luna (con esta Luna es difícil no aullar).

Robando momentos (aunque cada vez estén mejor escondidos).

Esquivando a la realidad (que le busca para pegarle los pies al suelo).

Nadando en aguas turbulentas (siempre sin guardar la ropa).

Aprendiendo a volar (suerte de cabeza dura).

El otro lado de la realidad

Se olvidó de no darse cuenta de que todo era un decorado de cartón, y ahora se pasa el rato buscándose los hilos por si resulta que es una marioneta.

(Eso explicaría por qué es de madera).

La oscuridad interior

Aunque a ratos consiga olvidarse de ella,
Siempre está ahí, preparada para saltar.
Y sí: la Luz es mucha, y es muy bella,
Pero no basta para poderla iluminar.

(Quedan muchos rincones de su alma,
Donde la luz nunca logra llegar,
Y lo peor es que son justo esos rincones,
Los que definen quién es en realidad).

Rosas

Pídele al Sol que no brille.
Dile al fuego que no arda.
A mi alma que no sienta.
Al corazón que no lata.

Ni la distancia ni el tiempo
Pueden con algunas cosas.
Por eso (y porque yo quiero)
Hoy te regalo estas rosas.

Quiero

Quiero decirte al oído las cosas que siento.
(Para disfrutarlo más, las diré muy lento).

Quiero sentir el calor del fuego encendido.
(Es que siempre se enciende cuando estoy contigo).

Quiero sentir a la Bestia desatada.
(Contigo cerca no la detiene nada).

Esa pequeña Magia

Es algo tan fuerte que nada puede romperlo.

Es algo tan frágil que hay cuidarlo constantemente.

(Cuidémoslo; no dejemos nunca que se rompa).

Fuego interior

A veces es cálido y acogedor, como el fuego de la chimenea.

Pero otras veces no. Otras veces escapa a cualquier control, y amenaza con devorarlo todo a su paso.

(Y siempre, siempre... arde por ti).

Épica derrota

Atravesó el Río de Lava Ardiente (no fue demasiado complicado).
Descendió al fondo del Pozo Infestado de Serpientes (nada que se salga de lo habitual).
Sorteó la Manada de Velociraptores Hambrientos (¡hombre! Por fin un toque de originalidad).
Se impuso sin problemas al Minotauro (se escucharon olés entre el público).
Encontró la salida del Laberinto Repleto de Trampas Mortales (fue entretenido).
Descifró el Enigma de la Esfinge (y la dejó pensando en el que él le planteó).
Derrotó al Ejército de Soldados de Terracota (aunque casi se rompe una uña con una esquirla).

... Pero no estaba preparado para esa mirada (se rindió incondicionalmente, no hizo falta ni un parpadeo).

Llamada

La Luna le llamaba...

La Bestia no podía hacer otra cosa que responder.

Menos mal que las cadenas eran fuertes.

(Fuertes, sí; pero no resistirán para siempre).

Chispa

Al principio no es más que una chispa diminuta y frágil.

... Pero así es como empiezan las mayores hogueras.

(No hace falta que sea grande para que sea Magia).

Contracorriente

Arde por dentro. Rompe las cadenas.
Elige el camino con el corazón.
No te rindas, pues sabes que haces lo correcto.
Aunque ellos sean muchos, no tienen razón.

Perspectiva

A veces cuesta no perder de vista lo que de verdad importa.

... Otras veces, no.

Su camino

Sabe que no es el camino más sencillo.
Intenta no olvidar por qué lo eligió.
No le importa que duela: le hace sentir vivo.

Rugir salvaje, la Bestia desatada.
Escuchar lo que le dice su corazón.
No confirmarse nunca con menos.
Darlo siempre todo, sin excepción.
Ir siempre hasta el fondo de sus sentimientos.
Rompiendo barreras, rasgando el telón.
Siendo fiel a sí mismo (con lo bueno y lo malo).
Entregado a las notas de su propia canción.

Recordatorio

Es la luz que sirve de guía en la tormenta.
(Una luz Mágica).
El fuego que derrite todos los muros de hielo.
El azul del mar.

(El recordatorio no es para mí; a mí no se me olvida).

Quién teme al Lobo Feroz

Soplaré y soplaré...

... y tu mundo de confortables mentiras derribaré.

Soñando sin sueño

Sueño con el azul del mar y con la arena.
Sueño con soles que caben en el bolsillo.
Sueño con Magia (pequeña) y con dragones.
(Dragones algo gamberros, dragones pillos).

No es fácil entender a los corazones.
... Y mucho menos entender al mío.

A la deriva

Perdido en medio del mar.
En el corazón de la tormenta.
Tan vulnerable, tan vivo.

(Y tu Magia siempre cerca).

Superpoderes

Tantas máscaras, tan complejas y tan cuidadosamente construidas.
Pero tú siempre logras ver a través de ellas.
Debes tener visión de rayos X, como Superman.

(Aunque, bien mirado, no creo que sea nada tan limitado; más bien me parece que lo que pasa es que sabes hacer Magia...).

Pequeñas locuras

En un rincón secreto de mi alma.
Viven millones de pequeñas locuras.

... Y todas las haría contigo.

(Bueno, vale: puede que algunas no sean tan pequeñas).

Palabras de más

A veces, lo mejor que se puede decir es un buen silencio.

Noche de fuego

... Y tantas cosas que quemar.

Ni caso

Tratarán de agarrarte los tobillos.
Para obligarte a poner los pies en el suelo.

Pero no les hagas caso.
Sigue volando.
Tan alto como puedas.

(Vive; siente; nunca es suficiente).

Noche de tormenta

Cuanto más arrecia la tormenta, mayor es el fuego que arde en su interior.

(La Bestia se remueve, hambrienta).

No tanto

Se supone que la Magia (la que es con mayúsculas) es por definición imprevisible. Uno nunca sabe dónde, cuándo, cómo o por qué aparece.

Yo no soy quien para rebatir a los grandes Maestros de la Magia. No faltaba más. Imprevisible, sí. Por supuesto.

(Pero entonces, ¿por qué siempre aparece cuando tú y yo sabemos?).

Prioridades

Vive.
(Antes de que se te olvide).
Siente.
(Imprudentemente).
Sonríe.
(Que esto que sientes no se enfríe).

La Magia nunca está lejos, si tú estás cerca.

Enmascarado

Aunque se muere por mostrar su verdadero rostro.

Lo sigue ocultando una noche más.

La máscara resulta cada vez más pesada.

Y cada vez cuesta más esconderse detrás.

(Y esos ojos que saben ver a través de ella,

Esos a los que no se les puede engañar).

Más que palabras

La oscuridad interior intenta ahogarme.
Una presión constante en el corazón.
No lo conseguirá, no te preocupes.
Aun me quedan fuerzas para buscar el sol.

Aulla. Ruge. Estalla. No te rindas. Adelante.

Soledad

Comprobado: la soledad duele mucho más cuando está bien acompañada.

Buen intento

La sonrisa era creíble y el tono amable. Todo tenía una apariencia de normalidad.

Pero ninguna máscara resiste si se la mira lo bastante.

Y el verdadero rostro sale a la luz.

Paseo por el lado oscuro

La noche es oscura. Peligros sin nombre acechan en las sombras.

Pero él camina seguro con paso firme.

"¡Qué valiente!", piensan unos. "Es un loco inconsciente", opinan otros.

Pero la verdad es bien diferente. La razón por la que no teme a todos esos monstruos...

... Es que ninguno da ni la mitad de miedo que el que habita en su interior.

(Y ellos lo saben, y se cambian de acera cuando él se acerca).

Perdiendo el rumbo

Camina con paso firme. Sabe lo que quiere. Lo tiene claro. Nada podrá apartarle de su objetivo.

Pero entonces ella se cruza en su camino. Y ahora está perdido en el fondo de una mirada.

(Y sin ganas de encontrarse).

Siempre está ahí

No le importa el tiempo ni la distancia.

Le da igual si es o no es un buen momento.

Sin límites. Sin condiciones.

La Magia siempre está ahí.

(¡Vívela!).

Canción rebelde

No es una canción al uso.
Como todas.
Es una canción rebelde.
Soñadora.

Habla de dragones
Que vuelan alto.
Por encima de un mar
Azul cobalto.

Es un poco gamberra.
Juguetona.
Pero dice cosas serias.
Entre bromas.

No estoy muy seguro
De que sea arte.
Pero es lo que tengo ganas
De regalarte.

Tendrás que ponerle tú
La melodía.
Pero a lo mejor consigue
Alegrarte el día.

Mantén la ilusión

Es verdad que el camino es complicado.
Sí; la carga es pesada y te duele la espalda.
Pero sigues llevando una medio sonrisa en la cara.
El brillo de tus ojos no se ha apagado.
Rendirte no es algo que vayas a hacer.
Al final llegará el día en que brille la Magia.

Vacío

Lo das todo, pero no es bastante.

La realidad se ríe de tus esfuerzos por cambiarla.

No importa cuanto empujes, la pared no se mueve.

(Y a ti te duele la espalda).

Y empieza a ser difícil recordar por qué luchabas.

Volcán interior

Los besos que no dimos nos queman en los labios.
Los abrazos que nos guardamos arden en nuestro pecho.
Las veces que apartamos la mirada nos van cegando poco a poco.

Y todo ese fuego se va acumulando en nuestro interior.

Si no lo dejamos salir, estallaremos en llamas.
Si logramos extinguirlo, nos volveremos de piedra.

Vive. Siente. Nunca es suficiente.

Iluso

A ratos cree que la suerte le sonríe
Que esta vez se va a comer el mundo
Y se adentra en ese mar azul profundo
Dejando que la vida una vez más le líe

A veces ve que el día es soleado
Y sale a pasear por el camino
Pero es sólo una broma cruel del destino
Estalla la tormenta y acaba empapado

Pero con nada de esto él escarmienta
No se vuelve cauto ni precavido
Y otra vez en el mar se ha sumergido
Y otra vez le ha pillado la tormenta

No se entera

Nada. No hay manera. Le da igual que no sea el momento, que no sea oportuno, conveniente, socialmente aceptable, políticamente correcto o incluso ni siquiera decente.

Es ver esa Luna y La Bestia toma el mando y asume el control (¿control? ¿Quién ha dicho nada de control?), y el pensamiento racional deja paso al instinto, y sólo existe el ansia de aullar y el hambre de carne cruda.

Rompe las cadenas. Deprisa.

(Antes de que amanezca).

Corazón oscuro

El palacio era uno de los edificios mejor guardados de la ciudad. Sus muros eran altos y estaban hechos de una rara piedra, traída de los confines del mundo y tratada con una poderosa magia que los hacía prácticamente imposibles de escalar. Doce guardias de élite lo vigilaban a todas horas, dos de ellos eran ogros. Sanguinarios sabuesos andan sueltos por sus jardines desde que cae la noche. Circulaban mil leyendas sobre los tesoros que albergaba.

El reto ideal para un Maestro Ladrón.

Trepó el muro imposible de trepar. Burló a los guardias de élite (consiguió que uno de los ogros devorase al sargento), Durmió a los sabuesos sanguinarios con una flauta mágica y se adentró hacia el corazón del palacio.

Cruzó salones, alcobas y una biblioteca, y llegó finalmente al Jardín Secreto que se hallaba en el centro mismo del edificio. En él, bañada por la luz de la luna llena, se hallaba la flor más bella que se pueda imaginar: el Corazón Oscuro. Lo que había venido a buscar. Sólo tenía que arrancarla y salir con ella, y la poderosa Magia de la flor le daría suerte y fortuna para siempre.

Mucho más tarde, en el rincón más oscuro de una lúgubre taberna, en sus manos un vaso de un vino mediocre, un Maestro Ladrón que seguirá sin tener demasiada suerte ni fortuna sonríe para sí. Era tan bella...

Sigue soñando

Dicen que ya no queda Magia en el mundo.
Es mentira.
Siempre quedan sueños por vivir.
El arco iris siempre vuelve a aparecer.
Otras noches de sol (o de tormenta).
Siempre (no dejes que se te olvide).

Palabras prohibidas

Imposible. Nunca. Cerrado. Olvido. No. Demasiado. Inalcanzable. Complicado. Incapaz. Obligatorio. Nada. Acabado. Lágrima.

Vive. Siente. Nunca es suficiente.

(Aunque hoy sea hoy).

Reto

Las puertas más secretas de nuestra alma, las que guardan las verdades más profundas, no tienen candados (no los necesitan).

Es nuestro propio miedo el que nos impide abrirlas. Saber que lo que hay dentro lo cambiaría todo para siempre.

Atrévete.

Inevitable

A veces, simplemente, no puedes evitarlo.

Nada que hagas puede evitar que te brillen los ojos, o que se pinte esa sonrisa especial en tu cara.

(Y son esos momentos los que hacen que todo lo demás valga la pena).

La llegada de la oscuridad

Y se cernió sobre el mundo la oscuridad.

La humanidad quedó desorientada, impotente. ¿Cómo valerse en un mundo sin luz? Desesperados, perdidos y agotados, temblaban de frío y miedo.

¡Ah! Pero no todos se sentían de ese modo. Unos pocos seres oscuros se movían sin problemas en la oscuridad. La oscuridad ya habitaba en ellos, y la entendían perfectamente. Estaban exultantes. Había llegado su momento. Se relamían, hambrientos.

Entonces, cuando todo parecía perdido, aparecieron. Eran poquísimos (se podían contar con los dedos de una mano), pero la oscuridad no podía afectarlos. Brillaban con luz propia, y ésta era tan potente que iluminaba también el camino a los demás. Poco a poco, la humanidad se fue reuniendo en torno a ellos, y así vio la luz un nuevo futuro. Uno en el que cabía la esperanza.

(No importa lo oscura y fría que sea la noche; siempre se puede encontrar algo de Luz).

Chispas de Magia

Al mirar algo sencillo, pero con ojos distintos.

Rompiendo en los mil colores de un arco iris secreto.

En un cruce de miradas que ilumina una sonrisa.

No se puede bajar nunca la guardia.

(Aparece cuando menos se la espera).

Nubes de tormenta

Es verdad: amenaza tormenta.

Y sí. Sería mucho más sano y más prudente quedarse quietecito y a cubierto. Esperar a que escampe.

... Pero no sólo hay vida al sol.

(Necesito bailar bajo la tormenta).

Deseos

Casi todo lo que quiero es imposible.
Además, no he sido lo bastante bueno para merecerlo.
(Aunque he sido mucho más bueno de lo que me gustaría).

Así que creo que no voy a pedir nada.
(¡Sorpréndeme, Destino!)