Realidad

Debe estar muy bien ser un Galante Caballero de Brillante Armadura...

... Pero la mía, la verdad, está hecha un asco y chirría.

(Y ni siquiera es de tanto matar monstruos: se me estropeó el otro día, con la tormenta de piedras).

Perderse con estilo

Cuando arrecia la tormenta (a veces llueven hasta piedras) no sale corriendo, ni busca refugio en un soportal.

Su reacción es siempre la misma: aprieta los dientes y sigue caminando, con paso decidido pero al mismo ritmo.

(Nadie que le viera diría que en realidad no tiene ni idea de a dónde va).

Que no se te olvide

No importa lo oscura que sea la noche.

Al final siempre vuelve a salir el Sol.

Limitaciones

Hay gente tan increíble y maravillosa que, por grande que sea la tormenta, puede hacer que salga el sol.

Yo no soy de esos.

Yo lo único que puedo hacer es mojarme contigo.

El Guardián de las malas ideas

Las malas ideas se agolpan en mi cabeza.
(Muchas que ni yo mismo me atrevo a pensar).
Esperan una rendija en el muro de piedra.
Para colarse por ella y poderse liberar.
Y el Guardián las observa, severo y alerta.
Nada si lo vieras te haría sospechar.
Pero hace ya tiempo que el Guardián lo que piensa
Es que le gustaría que lograsen escapar.

Confianza

Mira hacia adelante. Avanza. Sonríe sin miedo.

(Lo mejor está por venir).